La implementación del conteo electrónico de los votos de las próximas elecciones ha logrado lo que no pudieron las conversaciones y negociaciones: unir con un propósito a la oposición.Los candidatos presidenciales Luis Abinader, del Partido Revolucionario Moderno (PRM); Guillermo Moreno, de Alianza País; Minou Tavárez Mirabal, de Alianza por la Democracia; Soraya Aquino, Partido Unidad Nacional (PUN); Elías Wessin Chávez, del Partido Quisqueyano Demócrata Cristiano (PQDC) y Pelegrín Castillo, de la Fuerza Nacional Progresista, no pudieron ponerse de acuerdo para formar un bloque opositor que enfrentara al presidente Danilo Medina y los grupos que lo apoyan.
Y aunque acuden separados a las elecciones, a lo largo del discurso electoral han dejado abierta la posibilidad de unirse en una segunda vuelta, ya que, excepto Hatuey De Camps que lo da por contado, todos aseguran que habrá segunda vuelta.
La presencia de estos en la Junta Central Electoral (JCE) reclamando unidos el conteo manual en los tres niveles de votaciones puede indicar la apuesta a una segunda vuelta con miras a formar un frente común contra el Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
Mientras, el reclamo conjunto coloca al organismo en la disyuntiva de tomar una decisión que evite cualquier duda sobre la transparencia del proceso electoral y los resultados finales de las votaciones.
Demuestra, además, desconfianza en la JCE, que descarta la posibilidad de que el conteo electrónico pueda ser manipulado en favor de candidatos específicos.
Pero en el caso de que se produzca una diferencia de puntos entre el conteo manual y el electrónico, la imparcialidad de la JCE nuevamente se pondría en tela de juicio. -
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